Muchos factores de riesgo se pueden controlar en la infancia, disminuyendo así el riesgo de sufrir enfermedades del corazón en la edad adulta. Sin embargo, algunos son hereditarios o consecuencia de otra enfermedad.
Si no es el caso de tu hijo, promover la prevención en su infancia es la mejor forma de ahorrarle problemas del corazón en la adultez.
Es una enfermedad grave que con frecuencia no se detecta porque no causa síntomas. La mayoría de los casos de presión arterial alta en los niños se debe a otra enfermedad. Esto se denomina hipertensión secundaria.
La presión arterial alta (hipertensión) en los niños no es una cardiopatía congénita, pero puede haber un vínculo hereditario. Por ese motivo, cuando hay antecedentes familiares de hipertensión es necesario vigilar la presión arterial de los niños constantemente.
Esta enfermedad no se puede prevenir, pero es posible controlarla si se implementan cambios en el estilo de vida: ayuda a tu hijo a mantener un peso corporal saludable, aumenta su nivel de actividad física y limita su consumo de sal.
Si un plan de dieta y ejercicio no reduce la presión arterial de tu hijo, un check up médico podrá determinar si necesita otro tratamiento.
El colesterol es una sustancia grasa (un lípido) presente en todas las células del organismo. El hígado elabora todo el colesterol que el organismo necesita para formar las membranas celulares y producir ciertas hormonas. Cuando comemos alimentos de origen animal (carne, huevos, alimentos ricos en grasa saturada, lácteos), introducimos colesterol innecesario en el organismo.
En algunos casos, el colesterol elevado es hereditario; esto se denomina hipercolesterolemia familiar. Otros factores de riesgo son la obesidad, la presión arterial alta y el hábito de fumar.
Para reducir el riesgo de que se acumule placa grasa en las arterias, tu hijo debe:
Los niños diagnosticados con colesterol elevado deben, al menos, seguir un plan especial de dieta y ejercicio. Si con un año de tratamiento con dieta y ejercicio no se reduce el colesterol, debe acudir a un check up médico.
Se define como una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud. Una persona con un Índice de Masa Corporal (IMC) igual o superior a 30 es considerada obesa y con un IMC igual o superior a 25 es considerada con sobrepeso. El sobrepeso y la obesidad son factores de riesgo para numerosas enfermedades crónicas, como la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y el cáncer, entre otras.
La obesidad infantil se ha convertido en un problema a nivel mundial. Por ese motivo ha habido un incremento brusco en los problemas relacionados, como la diabetes tipo 2 que típicamente sólo se veía en adultos.
Si crees que tu hijo podría ser obeso, llévalo al médico para verificar que la obesidad no se deba a un problema médico. Si la obesidad no es causada por una enfermedad o trastorno, el médico probablemente sugiera algunos cambios en su estilo de vida, como:
En Hospital San Ángel Inn conocemos los riesgos de padecer enfermedades cardiovasculares. A través de un check up médico podemos determinar si tu hijo padece alguna y también nos aseguraremos de proveerle el tratamiento adecuado.